Hoy en día se habla mucho sobre las ‘relaciones tóxicas’, las cuales por desgracia siempre han existido, pero apenas en estos tiempos nos hemos dado cuenta de que están mal.
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Si bien el amor es un sentimiento muy bonito, hay ocasiones en que las uniones, lejos de ser sanas y motivar el crecimiento de lxs involucradxs, se vuelven destructivas y dañinas para ambxs.
Las relaciones sentimentales tóxicas
Se les llama así a aquellas relaciones donde existe un desequilibrio de poder. En estas parejas unx o ambxs ejercen manipulación, faltas de respeto, celos enfermizos o hasta abusos emocionales o físicos.
Aunque se juren amor, ambas partes de la pareja se sienten constantemente vulnerables, infelices y atrapadxs en un círculo destructivo.
Como tal, el término ‘tóxico’, aplicado a una relación, se refiere a comportamientos que perjudican la salud y el bienestar emocional de las personas involucradas, llegando a alcanzar consecuencias devastadoras.
Características de las relaciones tóxicas
En estas relaciones no hay respeto, sino que el sarcasmo, la humillación o los insultos son el pan de cada día como formas de control y dominación.
Pese a que ambas personas tengan actitudes tóxicas, suele haber un desequilibrio de poder. En estos casos, es unx de lxs miembrxs quien tiene una personalidad más manipuladora, mientras que la otra se sentirá más impotente y sumisa.
Otro rasgo de las relaciones tóxicas son los celos y la desconfianza, los cuales provocan que una persona limite la libertad de la otra, generando un ambiente de tensión constante y dando lugar a cuestiones como los celos.
Por último, el abuso (emocional o física) puede manifestarse a través de insultos, menosprecios o hasta golpes. Estos comportamientos generan dependencia e inseguridad en la otra persona, a tal grado que llega a sentir que no vale nada por sí misma.
Consideraciones finales
Una relación sentimental tóxica no es saludable y, de hecho, según expertxs, permanecer en este tipo de uniones llega a tener consecuencias graves para la salud física, emocional y psicológica de las partes involucradas.
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