En los últimos años el BDSM ha tomado fuerza como una forma de expresión sexual, independiente de cualquier identidad u orientación, relacionada con múltiples fetiches y, como cualquier otra práctica, expertxs sugieren diversos consejos para que sea más segura.
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¿Qué es el BDSM?
Sus siglas en inglés hacen referencia a diversas prácticas: Bondage, Disciplina, Dominación/Sumisión y Sadismo/Masoquismo. Las fantasías eróticas del BDSM se relacionan con el uso de restricciones, premios o castigos, juegos de poder o estímulos sensoriales, los cuales pueden ser placenteros o dolorosos.
Consejos para practicar el BDSM
Establecer límites claros
Antes de iniciar cualquier actividad lxs participantes deben comunicar sus límites, preferencias y áreas de confort. Esto ayudará a tomar acuerdos.
Usar elementos de seguridad
Aunado a la palabra o gesto de seguridad (lxs participantes suelen acordar alguna palabra o gesto ‘de seguridad’, la cual puede expresar la persona que adopta el papel sumisx en cualquier momento en que desee detener la actividad); los elementos o juguetes que se empleen deben ser de buena calidad y usados de manera adecuada para evitar lesiones mayores.
Consentimiento
Todas las actividades dentro del BDSM deben ser consensuadas. Por tanto, hay que respetar el momento en que alguien pida detener la actividad.
Mantener comunicación
Pueden comunicarse constantemente respecto a cómo se sienten, si algo les incomoda o les produce más dolor del esperado.
Tener un “aftercare”
Así se le llama al momento posterior a una práctica de BDSM donde la persona dominante brinda cuidados y contención emocional a la persona sumisa para ayudarle a volver a un estado de calma y bienestar.
Consideraciones finales
El BDSM puede ser una experiencia segura, saludable y placentera si se realiza siguiendo estos consejos, ya que el bienestar de lxs participantes debe ser prioridad.
SABER MÁS:
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